Anteayer, para la revista, Maxim, sacamos unas fotos para ilustrar las torturas de escuela. Qué pedo, éramos unos animales. O por lo menos yo sí lo era. Toda la primaria y secundaria asistí al Simón Bolívar, escuelareligiosacasimilitardepuroshombres, donde había una sola regla: o golpeas y molestas, o eres al que golpean y molestan. A mí me tocó un padre que cuando me recogía en la dirección por una pelea, en lugar de regañarme, me daba tips para pegar mejor. (Chale, hasta técnica de pelea tenía con cantidad de golpes, movimientos y zonas del cuerpo estratégicas). Así que formaba parte del primer grupo; los bullies. Lo cual, ahora me da harta pena. Además no era fácil mantenerte en ese grupo, pues todo el tiempo tenías que defender tu ‘lugar’ de otros alumnos que querían pertenecer ahí, o de otras ‘sociedades’ de bullies de distintos años. Resultado: una dosis de violencia diaria.
Recuerdo que para mantener a raya a otros alumnos, existían cierto tipo de torturas, las cuales iban desde un simple garnucho en el lóbulo de la oreja, hasta meterlos de cabeza en el escusado. Las más comunes eran estas:
Cerillo
Era quizá la más común. Consistía en tomar por el cuello a otro alumno, bajarle la cabeza a la altura de tu estómago y, con el dedo índice doblado, rasparle la cabeza hasta que se sintiera caliente.
Calzón chino
Todo mundo lo hizo y lo recibió. Tomas de sorpresa a alguien, encuentras el resorte de su calzón y lo jalas hacia arriba con todas tus fuerzas hasta que ya no suba más o, en su caso, se rompa el resorte. Se llama así porque con el jalón la prenda interior queda como calzón de sumo.
Chichi blanca, chichi negra
Aunque tiene un nombre tipo maya, no es más que un pellizco en el pezón. Mientras aprietas, le preguntas al otro: “¿chichi blanca o chichi negra?”. Si la víctima escoge blanca, aprietas lo suficiente como para cortar la circulación de la sangre, si escoge la negra, le das un twist al final para dejar un moretón.
Sacacacas
No es muy inteligente (pues te quedan las manos oliendo mal), pero sí muy eficiente. Como el calzón chino, es una estrategia sorpresiva. Cuando la víctima esté papando moscas (no me acodaba de esta frase), juntas las palmas como en posición de rezo, llegas por detrás y se las clavas en el trasero. De ahí el nombre.
No me acuerdo cómo se llamaba, pero podría ser La campana
Sujetas a alguien, de preferencia más pequeño que tú, lo llevas hasta el borde de un bote de basura y, de cabeza, lo arrojas adentro. Cuando veas que ya no se podrá levantar, comienzas a patear el bote con toda tu fuerza.
Por suerte, esa etapa ya pasó. Ahora soy un jipi pacífico de pacotilla, por lo que ya no me parece gracioso molestar a otros por ‘diversión’.
Nota: desde que vi Flatliners (Línea mortal) siempre quise hacer esto, en serio. A todos los molesté en la escuela; perdón. Era un pendejo (en el sentido argentino y mexicano). Sobre todo a ese nuevo alumno que después de un par de meses de molestarlo, sus papás lo dieron de baja. O al otro tipo que tenía un problema hormonal y que no dejaba de picarlo con una regla y decirle homosexual. O al tipo que descalabré con la puerta de un baño. O al que tiraba al suelo, me sentaba encima y lo obligaba a echarse pedos. O al… chale, ¿me iré al infierno?
Estás en pañales, dude. Yo lijaba a mis compañeros cuando teníamos que llevar lijas para pulir los pupitres. Era el world famoso concurso del dolor.
Les pegaba con un ‘látigo’ conformado por un cable …cuando me sentía Panthro.
¿Qué hay de cuando te embarraban un chicle en el cabello, truco también practicado por los profes?
Ya sabes. La pura belleza.
By: Cabrío on abril 3, 2009
at 1:16 pm
sí, qué horror!!! eras un delincuente en potenciaaaa!!! Aunque yo también era muy manchadita con mis compañeritos de la primaria, jojojo, qué tiempos aquéllos!!!
By: dotjacobs on abril 3, 2009
at 1:17 pm
o las clasicas cuando ponías tachuelas en las bancas, o no se como se llame, pero cuando te acagachas a tras de alguien y otra persona lo avienta.
O la otra era el caballo creo que se llama cuando entre dos personas agarraban a uno lo estiran y un tercero se sube y se sienta en su estomago y salta.
By: Rackve on abril 3, 2009
at 1:24 pm
Cabrío, estos son los más comunes, pero no son todos. Seguro te tocó rascarla la mano a alguien hasta hacerle una costra. O el típico de quemarle el brazo con la madre esa de laboratorio que funcionaba para calentar. Eran muchísimas. Ahora que escribí esto, me sentí pésimo.
By: volovan on abril 3, 2009
at 1:26 pm
Lo que me gusto es que fue todo ilustrado :S
By: Chucho on abril 3, 2009
at 2:06 pm
Oh, sí: te vas a ir al infierno. O, en su caso, como todo da vueltas, alguno de los que molestaste será anunciado como tu nuevo jefe, justo en el peor momento. Eso es mejor.
By: Omegar on abril 3, 2009
at 5:06 pm
En la secundaria en la que iba aplicaban de todo. Había un par de castigos que se aplicaban a alguien non grato en la escuela. El primero era madriza, y se aplicaba tal y como suena.
Al otro le deciamos violación, la cual no era como tal una violación, sino que le aplicabamos el clásico chivo con una serie de madrazos en la espaldas hasta que cayera al suelo. Recuerdo que la única forma de escapar a ese castigo era corriendo entre las piernas de todos o levantarse en friega. Recuerdo que a eso le llamaban «Chivo Breaker» gracias a que estaba de moda el juego de Killer Instinct.
Lo que hacíamos para sobrevivir en la escuela a esa edad.
By: zeruz on abril 3, 2009
at 6:08 pm
No te preocupes, tendras un hijo y sera el que sufra el bulling por sus amigos y asi seras redimido por todo el daño y dolor que causaste, en caso de que llegues a tener hijos, si no la maldicion se transferira a tus sobrinos, o al hijo de tumujer que mantendras y no sera tuyo.
By: Xoconostle on abril 3, 2009
at 7:41 pm
Te irás. (nos vemos por ahi, luego te doy señas de como llegar sin tanto tráfico).
By: Paulina on abril 3, 2009
at 8:39 pm
Nunca me lleve demasiado pesado con los amigos en la escuela, pero dios! espero nunca haberme visto asi de «metrosexual» como en esas las fotos.
By: Mijel GLLV on abril 4, 2009
at 10:28 am
Falto el clásico del dibujo tecnico.
Meter la regla T entre las piernas de algun incauto y jalar rapidamente. Las consecuencias siempre son divertidas
By: Eric Draven on abril 4, 2009
at 12:08 pm
Ay no, en la segunda foto, donde se supone, haces calzón chino, parece que lo estas sabroseando, le falta credibilidad a la foto =P…
por cierto, tal vez si vas al infierno por el detalle de la puerta del baño… te pasas! (digo, pasabas)
By: Anne on abril 4, 2009
at 1:07 pm
Lo que no entiendo, es porque agregar imágenes que en lugar de rechazar el bulling, lo incentivan…y si eso salió en Maxim, tantito peor.
By: Jennifer on abril 4, 2009
at 1:51 pm
Todos tienen sus momentos de sadismo, no te mortifiques por eso, al menos ya dejaste todo eso atrás.
Yo nunca fui bully ni tampoco víctima, en la primaria era demasiado invisible, pero un año escolar creo que fue 6to entro una niña nueva al salón y absolutamente nadie la quería, y eso es decir poco, le caía mal a todos, jamás entendí porque a mi me era indiferente, ni mal ni bien. Pero todo el salón se pasaba con ella, no la golpeaban pero era tortura psicológica que debería estar prohibida por la ONU, los niños son muy crueles.
By: Nayid on abril 4, 2009
at 2:51 pm
SI…
By: Fer on abril 4, 2009
at 3:26 pm
Sí, nos vamos a ir al infierno.
Este post me recordó una anécdota secundariesca que ahora postearé.
By: plaqueta on abril 6, 2009
at 7:04 am
yo me quedaba con los cabellos de los compañeros a los cuales les aplicaba la de «en dónde se paró el águila…»
By: guerotix on abril 6, 2009
at 9:11 am
jajaja «papando moscas»
¿Esa escuela sigue siendo la capital del bullying o ahora ya hay mas conciencia entre los docentes?
By: elosa on abril 6, 2009
at 10:34 am
Lo que más recuerdo del colegio de niñas (católicas y muy muy decentes, jaja) era el jalón del resorte de bra, ardor puro.
By: LucyLu on abril 6, 2009
at 5:54 pm
Pues falto el «paso del canguro» que consiste en acercarte a algún incauto y soltarle un rodillazo en la pierna, y se llamaba [o llama?] asi, por una canción del siempre distinguido fito olivares [http://www.youtube.com/watch?v=o7lkRZxpy3U&feature=related] y por como brincas cuando recibes un chingazo de estos 😛 jojo….
es verdad, eramos unas bestias 😛
By: Manny on abril 7, 2009
at 3:26 pm
yo no era de esas 😛
yo solo mordia jaja y los amigos de mi hermana mayor ( 7 o 8 años mayor) me tenian miedo
By: Spam on abril 7, 2009
at 4:37 pm
Sí, muchos nos iremos al infierno, pero una vez q nos encontremos, cómo nos vamos a divertir!!!! jajajajaja
By: Gabby on abril 7, 2009
at 5:12 pm
Compadre, te agrego para el manual de los ahora «Bullys» antes conocidos sólo como «Ojetes». 1. El oso. Similar a la campana pero haciendo que el otro wey se abrace de un poste, pero de cabeza. Si meas debajo del poste son puntos extra al verlo descender. 2. El arresto. Entrar al baño y sujetar de inmediato y entre dos los brazos de un wey meando, arrastrándolo hacia afuera del baño, no sólo dejando que se mee sólo si no ventilando sus miserias frente a primero B. 3. El Cerillo es más eficaz con una de esas gomas azules con rojo, obvio del lado azul.
Me están dando ganas de compartir mi conocimiento a las nuevas generaciones ojalá pudiera ilustrarlo tan bien como tu.
AD. HAGA DE SUS HIJOS BULLIES ANTES DE QUE LOS BULLIES LE HAGAN HIJOS A EL, SEA SEGUIDOR DEL BLOG DE SATAN® Y NUNCA SE ARREPIENTA DE LO OJETE QUE FUE ANTES DE TENER BARBA.
By: Satan on abril 7, 2009
at 10:05 pm
En los colegios del Opus Dei de niñas no había violencia física, pero que torturas psicológicas!!!
Mis compañeras me rompían mis reglas, escuadras, etc, y se comían mi lunch y mi agua. Malditaaaas!!
Ya en la preparatoria, y ya en el colegio de monjas apliqué dejar mis paladares en mi bote de agua no transparente: ahora sí, beban de mi agua!
By: Nena on abril 8, 2009
at 9:03 am
O aquella de calentar el pupitre de metal con un encendedor o mechero de bunsen, fuera en el laboratorio o en clase de Matemáticas, cuando el maestro te jalaba de las «greñas» si te parabas siquiera a sacarle punta al lápiz…
By: Chac on abril 8, 2009
at 11:24 pm
Perro, tu y todos los bullies que escriben aquí, arderán en el infierno…
By: Rekiem on abril 9, 2009
at 10:46 am
Maldito tus hijos lo pagarán
hahaha eso qué
😀
By: Yadhi on abril 10, 2009
at 2:29 am
Sí, eras un hijo de puta
By: Nadia on abril 10, 2009
at 10:23 pm
Yo más bien era de las que golpeaban, hasta que me harté y mejor me convertí en golpeadora, salía menos jodida y hasta me tenían miedo. Crearon un monstruo en mí.
Ahora también soy pacifista, pero sin duda, seré como tu papá, mejor que mi hijo se los chingue a que llegue todo golpeado a la casa!
Abrazo
By: Milau-Milau on abril 12, 2009
at 12:47 am
Eras todo un psico-killer! y NO no creo que te vayas al infierno..
Que intenso lo del sacacaca no lo supero ehhh
By: Soltera on abril 13, 2009
at 2:17 pm
Pues a mí me jodían tanto en la escuela que si hubiera tenido una pistola probablemente la habría usado. De hecho ya no me parecen tan impresionantes todas las masacres que han habido en gringolandia.
¿Qué creen que uno no se harta?
By: Alejandro on abril 23, 2009
at 10:38 am
es contra la ley hacer calzón chino (wedgie) en el estado de Kentucky
que tontería
By: avena on abril 26, 2009
at 5:11 am
pues yo no he hecho nada de eso pero si quisiera hacer el calzon chino o el sacacacas o no se como se llama pero es cuando a alguien le bajas el pantalon ese entre 5 compañeros se los bajaron entre ellos
jajajajaja
By: alfred on julio 2, 2009
at 9:15 am
Pues la verdad ilustra (literalmente) una situación muy culera el inche post… yo siempre he sido trancas pero también tengo cara de maldito así que desde la primaria los compañeros como que mejor ni me la armaban de pedo… Pero igual desde chavito me reemputaban los pinches gandallas (bulis ni que una madre): se me hacen una lacra de la sociedac… Una cosa es que te defiendas o en su caso que te desquites de alguien que te está chingando, y otra es que te diviertas a costa de chingar a los demás… Digo, yo sé que nunca va a faltar el güei gandalla, pero el hecho de que abunden no quiere decir que sean chidos… Además, siempre he entrado al desmadre pero así nomás verbalmente y chido, y si algo me cagaba además de que chingaran a alguien físicamente, era que se metieran con las cosas de uno.. En la primaria les dije a unos culeros que me tiraron a la planta baja mi mochila que si se volvían a tocarla les iba a orinar la suya (digo, su mochila)… No sé qué inche cara debo haber puesto, pero no se volvieron a meter conmigo… (ayeah…)
(Carajo… mejor me consigo un blog propio…)
By: Lalornelas on septiembre 4, 2009
at 12:59 pm
de que color son sus calzones????
By: jesus on septiembre 16, 2009
at 1:48 pm
jajaja yo ya ise el calzon chino bueno boxer chino por que al que se lo hice traia boxers eran azules de cuadritos jajajja le dolio muchisisimo
By: alfredo on enero 30, 2010
at 2:35 pm
no manches has de estar bien ruco!, el simón ya tiene años que es mixto jajajaja
By: uno más on abril 19, 2013
at 10:56 am